En los años sesenta, el cineasta sueco Ingmar Bergman (1918-2007) construyó una casa en la remota isla de Fårö, situada en el mar Báltico, dejó Estocolmo y se fue a vivir allí. Cuando murió, la casa fue conservada. Un grupo de cinéfilos muy especial, llegado de todo el mundo, viaja a Fårö en busca del genio y su legado. (Versión abreviada de «La videoteca de Bergman», 2012).